Desde pequeña, el arte y diseño me han apasionado más de lo habitual. Ya sea en las últimas hojas de las libretas escolares, exámenes, hojas sueltas, pizarrones, paredes, cuadernos viejos, libros y demás, son las herramientas perfectas para disfrutar de un buen rato. La creatividad nunca ha sido un problema para mi, el amor y pasión que tengo por mi carrera y las metas y sueños propuestos en mi vida, me alientan a seguir adelante y demostrar al mundo lo hermoso y colorido que puede ser lo más simple. 

 

Para mi, el diseño no es un trabajo, es mi estilo de vida. Disfruto mucho de una hoja en blanco y la cantidad infinita de estilos que se pueden crear. Es emocionante y retador imaginar y crear, que el mundo pueda gozar de una idea que da vueltas en tu cabeza y poder reflejarla gráficamente. 

El diseñador puede usar su poder profesional para persuadir y lograr objetivos a gran escala, contamos con mucho poder y es importante utilizarlo sabiamente. 

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"Un buen diseño puede cambiar al mundo". - David B. Berman

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